Jn 4, 43-54

Tengo un libro pendiente por leer llamado “Los Mitos acerca de Jesús”; aun no lo leo, tengo otros en espera pero mas me llama la atencion del titulo es todo lo atribuido a Jesús en la cultura contemporánea como en aquel tiempo.
Se han creado una serie de mitos sobre El, un hombre buena onda donde amaba a todos y todo estaba bien cero problema, otros como decían que había ido al Tibet para aprender a caminar sobre las aguas; así también vemos dentro de nuestra comunidad Católico esperamos de Cristo como un curandero, el genio de una lampara donde cumple todo lo que quieres hasta lo amenazamos o sentimos el privilegio de sentarnos a negociar con El.
El Evangelio de hoy me recuerda aquello, en recordar quien es Jesús y para que vino en aquel momento, por supuesto que para cada uno de nosotros Jesús se ha presentado en nuestra vida de distintas maneras, pero al final lleva al mismo camino. Cristo pudo abstenerse de hacer milagros mas los hizo no se negaba, El sabia lo que sucedería al final pero siguió caminando en medio de la gente.
Hoy pienso que el Evangelio nos direcciona a preguntar ¿quien es Jesús para nosotros? ¿Que hago para encontrarlo en mi diario vivir? ¿Confío en su Evangelio?
En nuestra oración podemos encontrar ese espacio y pedir a Dios Padre que nos de la sabiduría para conocer a Su Hijo, Dios nunca ha negado a su hijo.