Dios nunca ha decepcionado a alguien.
Tomada de la segunda lectura de San Pablo a los Romanos 5,1-5
San Pablo guardo en todo los momentos las promesas de Cristo en su obra de Evangelización, expreso sus sufrimientos corporales y espirituales, pero mantuvo la Esperanza. Pero es que Dios nunca ha defraudado al hombre, y no recuerdo alguien que haya sentido alguna ira en cuanto a lo que Dios da al hombre y aunque me voy a quedar corto en este espacio de lo que Dios nos da todos los días, puedo compartir aunque sea un poco.

La Esperanza en Dios es la mejor carrera que podemos emprender, guardar en El, aceptar el sufrimiento como parte de nuestro día a día, saber que existen diferencias entre hermanos pero aun así amando, ahí también se manifiesta Dios, desde una sonrisa, hasta un buenos días. Alli tambien se manifiesta; acercarnos al Padre es también cuando perdonamos cuando sabemos que ese aquel que cometió una falta es frágil como nosotros. No colocarme a mi en un pedestal arriba de los demás.
La paz no es la utopía o el adormecimiento de la conciencia. la paz es seguir adelante en medio de nuestra fragilidad, es no quedar paralizado.