Si das. hazlo que salga de tu corazón.
Evangelio Según San Mateo 6,1-6.16-18
Primero, me coloco en la época que Jesús hablaba y recordemos que existía una practica rígida de la ley, extremadamente piadosa, donde la misericordia era poca o casi nula. Se valoraba el tamaño de la ofrenda que el apoyo a la comunidad, era mejor ser visto dando la imagen de ser piadoso que estar atento a la necesidad de la comunidad o simplemente se hacia para recibir algo a cambio, una Fe mercantil.

Pienso que hoy aquel Evangelio como la carta de San Pablo nos propone la verdadera libertad y a ser capaces de dar sin expectativa y total desprendimiento. No porque vayamos a recibir sino mas bien porque realmente amamos. Amamos porque buscamos que aquel sea feliz y aplica para todas las necesidades hoy que las personas pueden tener. Nuestra Fe puede ser transforma si libremente la vivimos, pero si la vemos como una negociación entre el Padre y yo, en aquella Fe mercantil jamas experimentaremos aquel amor incondicional que su Hijo nos ha propuesto.